- Aprendo con Escuelas Positivas.
- Cuaderno de la superación
- Únete a Escuelas Positivas
- Mi historia
- I.E.N° 18169
- Testimonios Escuelas Positivas
- Escuelas Positivas 2020
- Un niño, una niña: Un huerto en casa.
- I.E. "ORO" 18187
- Escritores de Sueños, Esperanza y Superación
- Proyecto: LETRA I.
- Libros de Jose Luis Arista Tejada
- Educar es nuestro deber
- ASOCIACIÓN ESCUELAS POSITIVAS
- ESCUELAS POSITIVAS 2023
- Luis Diego y José Adriano
- CDIPE
lunes, 28 de agosto de 2017
domingo, 20 de agosto de 2017
jueves, 17 de agosto de 2017
Congón y mi labor de Profesor: Por Jose Luis Arista Tejada
CONGON Y MI LABOR DE PROFESOR.
Por Jose Luis Arista Tejada
Debo yo reconocer que Congón es el pueblo que me ha
abierto sus puertas de par en par, en toda su amplitud, en la que he podido
ingresar para ser parte de su existencia y ellos parte de la mía.
Es el pueblo que después de Inguilpata y Chachapoyas se
han convertido en mis favoritos.
En Inguilpata nací y crecí. En Chachapoyas me forjé.
Ahora en Congón me realizo.
Transcurre el tiempo.
Hoy solo quiero
decir que Congón para mí es el pueblo más bonito. Donde su gente pasa de todo
pero que al final de cuentas, sonríen con esperanza.
Probablemente no esté todo el tiempo aquí, pero sé que
Congón ha pasado a ser el nombre de un pueblo que con su gente tendré en el
cuadro grande y principal que cuelga en la pared de mi memoria. Tan grande y
hermoso como los cuadros dorados y de incalculable valor que tengo de
Inguilpata y Chachapoyas.
Cuando llegué a Congón, me abrieron las puertas con
cierto recelo, pero fueron pasando los días y sorprendidos mis ojos vieron
abrirse las puertas de par en par, en toda su extensión, entonces, pude entrar
y salir como integrante de la gran familia de Congón sin ningún tipo de
restricción.
Estoy sumamente complacido y ciertamente muy agradecido
de este hermoso pueblo que es Congón. Le tengo especial cariño y de seguro que
forma ya parte trascendental de mi historia. Una historia con hechos bonitos y
personajes simpáticos.
Es congón en el que puedes estar contento si es que eres
excelente, porque encuentras personas excelentes, porque quieren mejorar, se esfuerzan
cada día y están dejando de lado los egoísmos que aun pueblo no le permite
prosperar.
El ser profesor de educación primaria, me ha permitido
llegar a muchos y distintos pueblos, en especial de zona rural, conocer a niños
y niñas que de seguro van a ser los que transformen la realidad actual en algo
esperanzador.
Ser de Inguilpata, vivir en Chachapoyas y trabajar en
Congón produce en mí cierta satisfacción. Me enorgullece decir que estos tres
pueblos pasan a ser los oasis de mi vida.
Es por ello que, si bien no estoy en uno, lo estoy en el
otro. Si no hablo de uno, no dejo de hablar también del otro y viceversa.
Seguramente a muchos los pasa. Tienen preferencia
especial por algún lugar y si alguna vez se alejan, no significa que hayan
olvidado al lugar de su adoración.
Existen ciertamente muchos lugares hermosos en nuestra
querida tierra Amazonas. ¿Cómo no encantarse? Bien podría ser el paraíso. No
obstante, depende mucho de su gente.
¿Por qué será que uno se apega más a un pueblo que en
otro?
Creo que es precisamente por su gente, la actitud de su
gente y la actitud nuestra.
Ya alguien lo decía: la gente de un pueblo te trata como
tú te comportes.
Y un profesor, aquel profesor o profesora que va los
pueblos, muchas veces sacrificándose, lejos, distante, aislado y desprotegido
tiene ese privilegio de sufrir en inicio y de encantarse luego con el lugar y
su gente.
No siempre es así, efectivamente. Porque también existen
lugares donde abunda el desasosiego. La miseria de amor.
Es por ello que, cuando un profesor sonríe, el pueblo
entero sonríe. Cuando un profesor llora, nadie lo ve, nadie lo acompaña en su
llanto. Lo hace solo. Lucha con su tristeza solo. Luego sale afuera y comienza
a cantar con sus niños.
Aprovecho para decir entonces, que no lastimemos a
aquellos profesores que sí saben ser profesores de los buenos. En cambio de
acuerdo a su proceder corrijan a aquellos que se salieron del camino correcto.
Enmendemos los errores, pero no echemos la culpa a
aquellos buenos maestros.
Congón me trata bien. Debo decirlo.
Tantos otros lugares como San Ramón, María, Sengache,
Guillipcha vienen a mi memoria y espero yo, permanecer aun, en la memoria de
ellos.
Es hermoso decir que es un dolor de cabeza pero al mismo
tiempo una felicidad ser profesor.
Un dolor de cabeza porque te enfrentas con múltiples
dificultades y realidades. Con tristezas y fracasos. Con logros y alegrías.
Lejos de casa y muchas veces sin posibilidad de poder superarte más.
Pero es una felicidad serlo, porque ves a niños y niñas,
a padres y madres desbordarse de satisfacción con los logros de aprendizajes
que van alcanzando.
Gracias a los pueblos, a la gente que allí viven, puedo
yo hoy decir que he empezado a darme cuenta que soy profesor.
Es muy distinto escuchar a que alguien te llame profesor
y que ésta solo sea tu profesión. Es muy distinto a que te conozcan como
profesor a sentirte verdaderamente profesor.
Como profesor me doy cuenta que les debemos mucho a los
pueblos que nos acogen. Por eso, en esta ocasión, mi mensaje es de agradecimiento
a todas aquellas personas que hacen que la vida de un profesor sea agradable y
feliz mientras dura su estadía en ese lugar.
Gracias a Congón y a muchos otros lugares he podido
descubrir que soy profesor.
Y aquellos que son profesores y que no tienen la
oportunidad de desempeñarse como tales, no es que dejan de serlo porque les
negaron el puesto, son mas bien el potencial de maestros que pueden mejorar la
educación.
No está prohibido y tampoco es una vergüenza ser profesor
y yo estoy contento de serlo.
Gracias a toda la población de Congón, distrito de
Ocumal, provincia de luya , región Amazonas.
PROFESOR: JOSE
LUIS ARISTA TEJADA
domingo, 13 de agosto de 2017
Estoy aquí para decirte: ¡SÍ se puede! De: Jose Luis Arista Tejada
Estoy aquí para decirte: ¡SÍ se puede!
De: Jose Luis Arista Tejada
Quiero empezar mencionando el nombre de Inguilpata, "la flor del cerro", que no es tan solo un nombre, una flor o un pueblo, sino que es el lugar donde se originó mi existencia.
Mi infancia ¿Cómo fue? No lo recuerdo todo; no obstante, lo pasé tan a gusto jugando entre los cercos, en la chacra de maíz, entre varios hermanitos, trabajando junto a mi padre, abrigándome con un poncho, llorando en brazos de mi madre, peleándome con mis hermanos y despertándome al canto de un gallo.
En Inguilpata, la flor del cerro, he nacido y a veces yo me preguntaba: ¿Por qué vine a este mundo? ¿Para qué existo? ¿Qué debo de hacer por mi tierra, por mi patria?
Lo único que sé es que debo de dar lo mejor de mí, llenar mi corazón de todo ese bien que desea brindar, ser esperanza y prosperidad.
En tal sentido: ¿Qué hago para alcanzar la felicidad en mi existencia? ¿Qué cosas pienso? ¿Qué ideales tengo? ¿Cuán productiva es mi vida? ¿Qué valores practico? ¿Cuán disciplinados están mis actos, pensamientos y emociones? ¿Soy perseverante?¿Me conozco?
: "Caerse está permitido, pero levantarse es imperativo".
: "Retroceder nunca rendirse jamás"
Aldous Huxley decía que solo hay un rincón en el universo que a buen seguro puedes mejorar y ese rincón eres tú.
Sigue intentándolo. Persevera. No te des por vencido.
¡Sí puedes! me digo constantemente a mí mismo. Y lo sigo intentando.
Y pienso en mi madre, pienso en mi padre, siento que mi casa es, sin duda, el lugar más hermoso que conozco.
Hoy me digo a mí mismo: ¡Quiero perseverar!
Si la vida se vuelve complicada, corresponde perseverar. Si quiero felicidad y aun no la encuentro, perseverar. Si siento que ya no puedo más, perseverar, seguir.
Todo se puede.
No es imposible entonces de poder convertirnos en lo que deseamos. Todo lo bueno, productivo, hermoso, maravilloso, es lo que debemos buscar que sea parte de nosotros.
Sentirnos alegres de vivir.
La vida, en general, es lo que uno suele hacer y ofrecer.
Cuán importante es entonces hacer bien las cosas, meditándolas antes de ejecutarlas y ofrecer lo mejor de todo lo mejor que hayamos adquirido en virtud, conocimiento, amor, ayuda, servicio.
Cuán importante es saber que sí podemos mejorar para bien.
Saber que sí se puede dar mucho más de lo que se puede dar.
Saber que somos valiosos.
Poner en práctica la Auto disciplina, perseverar en ello, tener la motivación de vivir dignamente, haciendo el bien, produciendo, ayudando, luchando con esmero, manteniendo la esperanza y alcanzando nuestras anheladas metas, por más adversas que sean las circunstancias; si se quiere somos felices.
Además, si el éxito es 99 por ciento transpiración y 1 por ciento inspiración;
entonces, sudar la camiseta significa alcanzar el triunfo.
Que atractivo se torna así el vivir.
Ya no preguntarnos ¿Para qué vivo? Si no: ¿Dónde me necesitan? ¿En qué te puedo servir? ¿Te puedo ayudar?
Tengo excelentes amigos y amigas, excelentes hermanos que de una u otra forma estan involucrados en mi vida. Muchas cosas las debo a ellos, pues siempre confiaron en mí y estuvieron allí apoyándome.
Luego descubrí el amor de mis padres. Digo descubrí por que antes no me había dado cuenta lo mucho que ellos me querían
Existen problemas personales, problemas en familia y problemas sociales. Los padres se encuentran más preocupados en cómo conseguir el dinero y quizás tengan razón. ¿Qué es lo que te exige la sociedad?
Si quieres responsablemente, alimentar, vestir, educar a los tuyos.
Si quieres cobijarlos en una casa.
¿Qué te pide la sociedad? Pues dinero.
Lamentablemente, es por causa de dinero que se pierden muchas de las buenas actitudes y valores. Se pierden el amor, la comunicación, la solidaridad, el respeto, la dignidad, claro que depende mucho de cómo nos hayamos formado y de cómo estamos dirigiendo nuestra vida.
Existen muchas interrogantes que las podemos responder nosotros y no es preciso ser expertos en la materia. Tenemos las respuestas y lo más cauto que podemos hacer es demostrar con nuestra propia existencia, que si bien estamos dentro del problema, no somos un virus, infección o enfermedad que empeora la situación sino demostrar que estamos para contribuir con la solución y ello implica hacer que nuestra vida sea digna y un ejemplo a seguir.
Probablemente no seamos ejemplos a seguir ni como padres, ni profesionales, ni autoridades, ni como persona. Allí esta entonces la respuesta a los ¿por qué?
Sabemos por qué estamos así.
Sabemos que estamos actuando mal y no procedemos a corregirnos.
Sabemos que el caos va incrementándose rápidamente y no nos apresuramos a detenerlo.
Hoy quiero aprovechar para agradecer y agradar a Dios siendo saludable.
Yo defiendo y argumento que nuestra vida debe ser productiva ¿cuán productiva es nuestra vida? ¿Qué he hecho? Es justamente eso lo que ahora estoy intentando responder justamente preguntándome una vez más a mí mismo ¿hacia dónde quiero llegar? ¿Qué hago? ¿Qué puedo hacer con el resto de mi vida?
Una capacidad que todos debemos desarrollar y cultivar día a día en nuestra vida es la de resiliencia, que es la aptitud de sobreponerse a los más grandes fracasos.
Uno puede ir por el mundo sin interesarle todo esto. Que importa si unos sufren y otros ríen. Que importa si construyo la felicidad o destruyo la vida. Puede ir uno por el mundo sin preocuparse por nada, si me aman o no me aman, si amo o no amo; si voy por el mundo como hoja arrastrada por el viento, que importa; sin embargo, sí debería importarnos, porque de lo contrario, se deja de ser, un ser humano de verdad.
El mundo, es el mundo un problema.
En nuestro planeta existen personas a quienes no les gusta ya el mundo. Pues, el mundo los humilla, los hiere, los maltrata, que llegan en la desesperación a desear, darle al mundo un golpe en la cara, patearle hasta cansarse.
Hoy he visto el día acabarse, mas, no he visto acabarse el sufrimiento de las personas. El día terminó, mas no termina el sufrimiento que experimentan miles de miles de personas.
Hoy, en el transcurso del día, he descubierto en mi entorno a gran cantidad de gente que no aspira ya a ser mejor de lo que es, ni a estar mejor de lo que está; simplemente se esfuerzan en convivir con el sufrimiento y el dolor. Su esfuerzo ya no da para más. No puede ponerse de pie. No puede salir y mirar el sol. No puede conseguirse otro trabajo. No puede comprarse unas zapatillas nuevas. No puede darse el lujo de soñar despierto; no porque no quiera, sino, se marchitó la autoestima. Se murió el entusiasmo. Se quebrantó la salud. Cayó sobre ellos las injusticias. Los maltrataron. Les robaron la felicidad y ahora viven, porque la vida continúa.
¿No son acaso héroes de la vida?
Elogio el esfuerzo, el tesón, el entusiasmo, la perseverancia. Qué bueno que hayan seres humanos con esas características. Hacen el bien. Contribuyen con la humanidad a pesar de que ellos están pasando por malos momentos.
Me porto bien. Me porto mal.
A veces no sé cómo me porto.
Si hago bien, si hago mal.
Pero en la mayoría de veces, sí sé, que mi actuar es correcto o incorrecto.
Si debo de ser elogiado o en todo caso, censurado.
En Chachapoyas permanece para siempre mi alegría. Yo estuve aquí, sigo estando aquí en Chachapoyas. A veces me ausento por el trabajo, pero vuelvo una y otra vez a esta ciudad que con el pasar de los años se ha ido vistiendo de muchas maneras, desde la elegancia, lo típico, lo colorido, lo festivo, hasta incluso lo sombrío y triste.
Yo sigo pensando que sí existe todavía aquello que dignifica a la persona. Aquello que hace del ser humano una bendición.
La esperanza de un mundo mejor sí es posible. ¡Claro que lo es!
Somos capaces de lograrlo. Ya no permitamos que se diga que nuestra sociedad está nefasta, hecho un asco, llena de corrupción. Ya no permitamos que nuestra sociedad sea cada vez más peligrosa y que en ella ya no se pueda vivir con seguridad y confianza.
Tenemos que cambiar algunas cosas de nuestra vida.
¡Tenemos que hacerlo!
Abandonarnos a nosotros mismos y abandonar los ideales
y sobre todo lo lindo y digno de la vida, es seguir con lo mismo.
Necesitamos mudarnos.
Mudarnos de actitudes, ideas, actos, todos ellos negativos.
Quedarnos con los positivos y productivos.
Es la vida la que grita: ¿Qué estás haciendo?
Es la vida la que se esconde, se muestra, brilla, se opaca.
Se pone de fiesta a veces. Se entristece.
En fin. Como diría alguien:
"de todo un poco".
Sin embargo lo solemne de este diario transitar, es sin duda,
perseverar en las cosas correctas.
Sí podemos encontrar la felicidad,
Sí podemos tener un mundo mejor
y estoy seguro que lo mismo piensas tú.
Existe algo en mí que me vigila y me pone en aprietos, me corrige, me cuestiona, me reclama y hasta incluso me castiga.
Existe algo en mí que se encarga que las cosas se hagan bien; de lo contrario, esta disgustado, inconforme, fastidiado y ese algo es mi conciencia.
En verdad, si tendrías que sancionarte y dar un veredicto de acuerdo a lo actuado hasta el momento, seguramente tienes muchas faltas que enmendar, heridas que curar, deudas que pagar, en definitiva, amonestaciones drásticas que aceptar por las faltas graves contigo mismo.
Y es momento de empezar de nuevo. Estoy seguro que lo lograrás y yo estoy aquí para decirte ¡Sí se puede!
Jose Luis Arista Tejada
lunes, 7 de agosto de 2017
¿Cuándo haremos respetar nuestros derechos y el de los demás? Por: JOSE LUIS ARISTA TEJADA
¿Cuándo
haremos respetar nuestros derechos y el de los demás?
Por: JOSE
LUIS ARISTA TEJADA
Escucho hablar a personas de mi entorno sobre la
corrupción existente en sectores diversos de nuestro sistema social.
Me llama la atención que se hable del tema a rienda
suelta, tan abiertamente y con fluidez, expresando sus quejas y enojos hacia
tal o cual estamento y que sea mas bien una dificultad el hacer oficial la
denuncia; es decir, no solo hablarlo en una conversación informal que ocurre en
cualquier lugar, si no, hacerlo formal mediante los recursos existentes para
impedir que la corrupción en sus distintas formas continúe haciendo de las
suyas.
Recuerdo haber escuchado a muchos decir que ellos sí
lograrían demostrar que tal funcionario estaría comprometido en actos de
corrupción. Que no dejaría que hagan lo que hicieron a X persona, a quien le
pasearon de oficina en oficina sin que le resuelvan su problema de injusticia.
Hay quienes demuestran convicción al decir que si son
capaces ellos de denunciar las injusticias; no obstante, son solo palabras,
porque después les vemos de lo más cómodos en el ruedo. Se burlan todavía de
aquellas personas que buscando justicia no la encontraron, pues las cerraron
las puertas. Se burlan al decir que son inútiles y que ellos si serían capaces
de hacer temblar a tanta autoridad corrupta; no obstante, son solo palabras.
Hay quienes sin hacer tanta bulla, hacen respetar sus
derechos y el de los demás. Luchan por el bien de todos; mas no por una
cuestión de superioridad o vehemencia pasajera.
Hay quienes si luchan contra las injusticias aunque para
ello se someten a múltiples dificultades, arriesgando incluso la propia vida.
Son valientes y son pocos.
Todos sabemos de lo malo que hacen las autoridades,
dirigentes, ciudadanos; pero pocos nos atrevemos a formalizar la denuncia.
Preferimos hablarlo informalmente en cualquier ocasión que se toque el tema
fortuitamente y exteriorizamos lo que hemos visto, oído, sentido sobre las
injusticias que se cometen y es como si nuestra cólera y nuestra indignación se
las llevara el viento.
Cuantas veces yo mismo he visto a muchas autoridades
abusar de las personas que por uno y otro motivo tienen que recurrir a ellos.
Cuantas veces me he indignado y no he dicho ni hecho nada
al respecto.
Cuantas veces he visto que el derecho de los demás es
atropellado sin la mínima muestra de respeto y dignidad.
Cuantas veces he dejado de ir a preguntar y reclamar por
mis derechos y el de los demás por saber también que a uno le pondrán pretextos
e intentarán rebajarte con una mirada hostil, una palabra desalentadora, una
respuesta incongruente.,
¿Cuántas veces he permitido a que pase por mi lado una
persona abatida sin que yo pueda hacer algo por ella?
¿Cuántas veces Dios mío he cedido y me he resignado a lo
que se de, pudiendo corregir los disparates con que se abastecen los que abusan de los demás?
Existen quienes detestan ya llegar a una oficina. Los que
aborrecen continuar recurriendo a la misma autoridad. Los que le tienen ya
aversión a seguir reclamando porque no les hacen caso.
Los abusos cometidos han traído como consecuencia, a que
los funcionarios públicos sean vistos como seres irresponsables de los que la
sociedad está profundamente decepcionada.
¿De qué nos sirve ser grandes personalidades y llenarse de
diplomas y cargos, si perdemos la humildad para realizar bien nuestra función?
Alguna vez, todos
hemos soñado con transformar el mundo. Hemos soñado con llevar paz, amor,
alegría y prosperidad a los demás, y yo lo sigo soñando; sin embargo, como dice
Dicken, “hay grandes hombres que hacen a todos los demás sentirse pequeños.
Pero, la verdadera grandeza consiste en hacer que todos los demás se sientan
grandes”
Tom Dooley dijo: que “nadie tiene derecho a ser feliz él
solo, cuando hay personas con hambre y dolor”.
En conclusión, las autoridades no tienen derecho a abusar
de los demás y si han soñado con coronas y cargos, que no sea para abusar, corromper,
servirse. Que piensen como Zoroastro que dice: hacer el bien no es un deber, es
una alegría.
Por último, es además nuestra obligación denunciar las
injusticias que se cometen y para ello tenemos que ser valientes y demostrar
también dignidad y respeto.
SSaludo la lucha
de los profesores, la lucha de todo profesional, la lucha de toda persona, la
lucha de toda Institución, la lucha de todas la familia y en especial, la lucha
diaria de nuestras queridas madres abnegadas en el todo el planeta.
JOSE
LUIS ARISTA TEJADA
domingo, 6 de agosto de 2017
Finalista a premio "Maestro 20" de Luya
Finalista a premio "Maestro 20" de Luya otorgado por el Gobierno Regional de Amazonas presentará su libro "Estoy aquí para decirte: ¡Sí se puede!"

|
El próximo viernes
04 de agosto, el Mg. Jose Luis Arista Tejada efectuará la presentación de su
libro “Estoy aquí para decirte: ¡Sí se puede!” en el Auditorio de la
Municipalidad Provincial de Chachapoyas. El destacado maestro fue uno de los
nalistas al reconocimiento “Maestro 20” y fue postulado por la UGEL Luya para
el Premio “Maestro Amazonas 2017” efectuado en el marco de la celebración del
día del maestro peruano y en cumplimiento de las políticas educativas de
revaloración del trabajo docente que impulsa la actual gestión de Gilmer Horna
Corrales, Gobernador Regional de Amazonas.
Cabe indicar que, Arista Tejada
es autor de una amplia producción literaria. Entre sus publicaciones más
importantes guran: “Lágrimas y alegrías del profesor Máximo” (2015),
“Estrategias combinadas de estilos de aprendizaje para mejorar la comprensión
lectora” (2015), “Tener vida”
(2013), “Isimar” (2012), “Mi
corazón está en casa” (2009), “Flor del cerro” (2008), “La ciudadanía en el
Perú” (2006), entre otros escritos.
NOTICIAS RELACIONADAS
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Escritores de sueños, Esperanza y Superación 2025
Escritores de Sueños, Esperanza y Superación: Transformando la educación a través de la Escritura "Escritores de Sueños, Esperanza y S...

-
Escuelas Positivas Conoce las propuestas de Escuelas Positivas Lee y conoce más: 👉 Articulo científico de ESCUELAS POSITIVAS Programa “esc...
-
Cuaderno de la superación. Cuaderno de la superación con fichas para fortelecer el bienestar socioemocional. Pongo a tu disposición el ...
-
La poesía como medio de auto superación. Conoce más sobre la poesía e historias de superación en días de cuarentena en el siguiente enla...
-
La poesía como medio de autosuperación . Escritores de sueños, esperanza y superación 2019- 2024 Aquí👉 https://joseluisaristatejada.bl...
-
Feliz aniversario Fidelísima ciudad de Chachapoyas. http://joseluisaristatejada.blogspot.pe/ https://estoy-aqui-para-decirte...
-
Trascender e inspirar. El objetivo del Proyecto es Fomentar el hábito lector en estudiantes, docentes y familias, mediante la implementaci...